
Tú eres divino en mi vida, tú eres mi dulce agonía. A veces te odio porque tú sabes cómo convencer, tú eres estrella en mi mundo que guía mis pasos sin rumbo, posees un arte especial, te sabes hacer desear. Me acostumbraste a amarte así entre una espina y una caricia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario